Has elegido rechazar las cookies basadas en consentimiento que utilizamos principalmente para gestionar la publicidad. En adelante, para acceder a nuestra web tienes que elegir alguna de las siguientes opciones.
Premium
3,99 €/mes o 39,90 €/año
Sin publicidad y mucho más
Plus
Por 9,99 €/mes
Contenido exclusivo y sin publicidad
Si has cambiado de idea, puedes aceptar las cookies y continuar usando iVoox de forma gratuita.
Con tu consentimiento, nosotros y nuestros 813 socios usamos cookies o tecnologías similares para almacenar, acceder y procesar datos personales, como tus visitas a esta página web, las direcciones IP y los identificadores de cookies. Algunos socios no te piden consentimiento para procesar tus datos y se amparan en su legítimo interés comercial. Puedes retirar tu consentimiento u oponerte al procesamiento de datos según el interés legítimo en cualquier momento haciendo clic en ''Obtener más información'' o en la política de privacidad de esta página web.
Nosotros y nuestros socios hacemos el siguiente tratamiento de datos:
Almacenamiento y acceso a información de geolocalización con propósitos de publicidad dirigida, Almacenamiento y acceso a información de geolocalización para realizar estudios de mercado, Almacenar la información en un dispositivo y/o acceder a ella , Datos de localización geográfica precisa e identificación mediante análisis de dispositivos , Publicidad y contenido personalizados, medición de publicidad y contenido, investigación de audiencia y desarrollo de servicios , Uso de cookies técnicas o de preferencias.
Comentarios
os recordamos visitar en Youtube método BUTEYKO.... miles de gracias por este gran podcast....
Un artículo muy interesante. Me siento totalmente identificado. Es curioso, pero es verdad que respiro por la boca, casi inconscientemente, que al cerrar los labios estos al poco tiemblan, e incluso que aunque me fuerce a respirar por la nariz, tengo la sensación de agobio y de que me falta aire o me da un poco de mareo. Sin duda tengo que poner énfasis en este tema.
Muy muy interesante. Totalmente identificada con el síndrome oral. Lastima que no haya dado más tiempo para recomendar tratamientos en adultos. Blanes me pilla lejísimos y más hoy día..,