Has elegido rechazar las cookies basadas en consentimiento que utilizamos principalmente para gestionar la publicidad. En adelante, para acceder a nuestra web tienes que elegir alguna de las siguientes opciones.
Premium
3,99 €/mes o 39,90 €/año
Sin publicidad y mucho más
Plus
Por 9,99 €/mes
Contenido exclusivo y sin publicidad
Si has cambiado de idea, puedes aceptar las cookies y continuar usando iVoox de forma gratuita.
Con tu consentimiento, nosotros y nuestros 813 socios usamos cookies o tecnologías similares para almacenar, acceder y procesar datos personales, como tus visitas a esta página web, las direcciones IP y los identificadores de cookies. Algunos socios no te piden consentimiento para procesar tus datos y se amparan en su legítimo interés comercial. Puedes retirar tu consentimiento u oponerte al procesamiento de datos según el interés legítimo en cualquier momento haciendo clic en ''Obtener más información'' o en la política de privacidad de esta página web.
Nosotros y nuestros socios hacemos el siguiente tratamiento de datos:
Almacenamiento y acceso a información de geolocalización con propósitos de publicidad dirigida, Almacenamiento y acceso a información de geolocalización para realizar estudios de mercado, Almacenar la información en un dispositivo y/o acceder a ella , Datos de localización geográfica precisa e identificación mediante análisis de dispositivos , Publicidad y contenido personalizados, medición de publicidad y contenido, investigación de audiencia y desarrollo de servicios , Uso de cookies técnicas o de preferencias.
Comentarios
A ver si por fin alguien hace algo serio en lo referente a este asunto, hay muy poca literatura al respecto, interesante revisar el libro de Chionetti donde hay datos nuevos, el de Goldstern es genial (leed antes el de la tierra hueca) el de Guillermo Aguirre imprescindible, ahora estoy con el de Hall ya veremos que cuenta. Saludos y gracias por el trabajo
Me ha encantado la idea del Grupo Operativo Tayos, pero… Nosotros sabemos que su objetivo es el conocimiento, no saquear las “riquezas” de los shuar; ahora bien, ¿así lo entenderán ellos? Están muy escarmentados, ¡si hasta el grupo que bajó con el primer hombre que pisó la Luna se llevó un montón de cajas llenas de sus tesoros! ¡abriéndose paso a tiros! Me temo que sólo por llevar la etiqueta “Tayos” ya os verán como ladrones, os pondrán obstáculos, si pueden os robarán… Naturalmente terminaréis bajando a la cueva, pero lo bueno sería tenerlos como amigos. ¿Cómo se las arregló el Padre Crespi? No creo que ni siquiera les mencionara la cueva. Les ayudó, compró su artesanía para darles dinero sin que se ofendieran, y siguió así durante muchos años. Ahora los shuar estarán viciados con lo de sacarles dinero a los turistas que quieren entrar en “su cueva”, pienso que sería más interesante regalarles otra cosa que tienes en abundancia: conocimientos de sabiduría ancestral, temazcales… No conozco el terreno, será selva con pocos habitantes, pero pequeños núcleos habrá en el territorio de los Tayos. ¿Sería posible que el primer viaje fuera para dar conferencias y talleres? Naturalmente, sería en pequeños núcleos de población, pero si, como has hecho en muchos lugares, pudieras dejar algunos grupos aficionados a los temazcales, grupos fijos, y que poco a poco fueran interesando a sus vecinos shuar… Favorecer un intercambio de conocimientos y experiencias, y a ser posible con los chamanes y los que lleven tatuados en la cara los tres círculos que decía Andreas Faber Kaiser: ¡el sígno de los guardianes del mundo subterráneo! Como colofón de mi Cuento de la Lechera, podríais interesar a las autoridades locales con la posibilidad de convertir la zona en el equivalente ecuatoriano de Capilla del Monte, pero en sabidurías ancestrales en lugar de OVNIs. O todo esto son mis alucinaciones causadas por la obligación de respirar con tapabocas :-)