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Comentarios
Un tema escandaloso y prácticamente ignorado por la prensa mundial. Haría falta que Wikileaks se ocupara de ello.
Guay
thanks.
Buah que exquisito programa, un saludo..!
Gracias por tratar este tema tan sangrante y, por el momento, tan ignorado. Llevo 30 años en los EE.UU. y me acuerdo muy bien de D. Rumsfeld diciendo en tv -con su calma característica- que no sabía dónde había ido a parar esa cantidad ingente de dinero. Nada nuevo en Rumsfeld, quien nos mintió diariamente, con alevosía y con la mayor naturalidad durante los conflictos del Golfo Pérsico. El tema ha salido a la palestra informativa un par de veces, pero como bien cuenta el invitado, siempre ha ocurrido *algo* que lo ha eclipsado. Creo que sí se sabe en qué se ha gastado ese dinero. Este gobierno -ya sea Republicano o Demócrata- ha sido siempre muy puntilloso con las cuentas (estando casada con un oficial de la U.S. Navy a cargo de presupuestos multimillonarios, sé que hay que dar cuenta de dónde se gasta cada centavo). Aunque también se sabe que el dinero atrae a golosos con *sticky fingers* (dedos pegajosos, como se dice aquí), y que los encargados de las contratas no siempre se las dan al mejor postor. A principios de los 90 salió a la luz que el Pentágono estaba pagando 300$ por destornilladores entre otras burradas, lo que fué objeto de muchos chistes y bromas. Coincido con el invitado en que ese dinero de caja B debe haber ido a financiar guerrillas y gobiernos en zonas de conflicto por todo el tercer mundo (es tan fácil apoyar guerras en territorio ajeno...) y aquí sabemos que se envían tropas a lugares difíciles de encontrar en los mapas. Pero de vez en cuando también se descubre que a lo largo de los años se han financiado muchos proyectos militares secretos sobre temas que rayan la ciencia ficción (armamento sónico y electromagnético, varios tipos de exoesqueletos, tejidos antimunición o de invisibilidad, etc. entre los que se conocen). Sirva como ejemplo las extrañas naves que se ven en lugares como el Area 51 y otras bases similares y que no podemos concluir que sean de origen extraterrestre. Solo espero que cuando llegue un nuevo presidente el terreno informativo se calme un poco y -quizás- alguno de los excelentes periodistas de investigación de este país desentierre el asunto de nuevo.
muy buen programa.