Hoy madrugamos un poquito más de lo normal, para ver qué pasa con esto de los madrugones. Si son productivos, si son buenos para nuestra salud. Y qué es exactamente lo que nos pueden ofrecer. Eso sí, aquí no se obliga a nadie a madrugar!! Porque para eso está el podcast, para escucharlo cuando queráis!
Ver en iTunes · Ver en iVoox · Ver en Spotify Enlaces y notas del episodio Página de podcasts
Página del blog
Todos los cursos
Registro en los cursos
Formulario de contacto para feedback
Facebook de Coaching De Músicos
Transcripción del episodio completo: Madrugar o no madrugar… esa es la cuestión Muy buenos días! Bienvenidas y bienvenidos a Coaching De Músicos
… el podcast en el que hablamos sobre conceptos, hábitos, técnicas, estrategias, conductas, habilidades y competencias del coaching pero enfocadas esta vez a la enseñanza musical y la vida del músico en general.
Porque sí, ¡los músicos también tenemos vida! Y aunque a veces se nos olvide, detrás de cada instrumento hay una persona! Así que vamos a dedicar un poco de tiempo cada día a hablar de esa persona, a hablar de ti: de tus necesidades, aspiraciones, deseos, ambiciones, valores, creencias, miedos, frustraciones… y todo lo que esté en nuestra mano. ¡Esto es Coaching De Músicos!
Hoy es jueves 13 de diciembre, y para este episodio número 74, madrugamos un poquito más de lo normal (de hecho este episodio ha salido hoy a las 6:11). Vamos a ver qué pasa con esto de los madrugones. Si son productivos, si son buenos para nuestra salud. Y qué es exactamente lo que nos pueden ofrecer. Eso sí, aquí no se obliga a nadie a madrugar!! Porque para eso está el podcast, para escucharlo cuando queráis!
Pero antes, dejadme que os recuerde que toda la información, el podcast, el blog, las sesiones, los cursos online y todo lo que necesitéis, lo podéis encontrar en CoachingDeMúsicos.com.
Ya tengo la encuesta preparada, para que seáis vosotros y vosotras las que elijáis el próximo curso en Coaching de músicos. Así que mañana os cuento cómo votar y listo, para la semana que viene empezamos a dejarlo claro.
Y si aún no estáis suscritos, podéis votar igual. A ver si ese próximo es el curso que os hace decidiros! (eso sí, hacedlo antes de fin de año, que luego sube el precio!)
Me gustaría mucho hacer un experimento. Ver a qué hora escucháis el podcast. ¿lo hacéis por la mañana? Alguno o alguna os despertáis antes de las 7:11 en España y en cuanto sale es vuestro momento de escucharlo? Si queréis podéis parar ahora mismo el episodio y escribir un comentario o enviar de cualquier forma algo que me diga a qué hora estáis escuchando ahora mismo.
Para los más madrugadores o madrugadoras, hoy lo habéis tenido incluso antes. Ya que hablamos de madrugar… hemos hecho madrugar un poquito más también a este episodio.
Si recordáis, el lunes estuvimos escuchando y respondiendo a algunas preguntas de los oyentes. Y en concreto una, la de María, preguntaba si de verdad era necesario despertarse a las 5 de la mañana.
Bueno, ya aclaré que no, que en absoluto creo que sea necesario, sino que más bien lo necesario es dormir 7 u 8 horas cada noche. Pero la verdad es que a mí me funciona de maravilla.
Así que hoy voy a hablaros de varias cosas:
Cómo afecta madrugar a nuestro cuerpo
Como afecta madrugar a nuestra productividad
Brevemente mi experiencia y qué encuentro yo.
Madrugar para la salud Bueno, hablando de salud, lo primero es aclarar que no voy a dar ningún dato médico, bueno porque no lo soy. Voy a hablar de estudios, de experiencias y de diferentes artículos que he leído, igual que podríais leer cualquiera de vosotros. Pero no tomemos esto como si fuera una verdad médica.
Pero sí que hay bastantes estudios que hablan por ejemplo de que madrugar ayuda al sistema inmune (o inmunitario, como dice la FUNDEU), porque una exposición temprana a la claridad del día, activa diferentes procesos nuestro cuerpo ( por ejemplo la síntesis de la vitamina D).
Además, cuando amanece aumenta la presión arterial y para la secreción de melatonina. Empieza a subir la temperatura del cuerpo y los niveles de glucosa. También es el momento más alto de cortisol. Todo apunta a que el cuerpo está bastante bien programado para estar despierto ya en ese momento, cuando sale el sol, para activarse y empezar con el día a día.
De hecho, estoy recordando algunas frases relacionadas con el budismo que hablaban de lo beneficioso que es estar despierto cuando sale el sol. “Ver salir el sol” creo que decía exactamente. Y seguro que todos conocéis asanas de Yoga como el saludo al sol.
Pero hay más. ¡Y es que madrugar reduce el estrés! Esto es menos espiritual, pero seguro que compartís conmigo que si nos despertamos pronto, tenemos más tiempo para prepararnos, no salimos corriendo de casa para llegar a la escuela o al trabajo, preparamos el desayuno con más calma, y en general tenemos menos sensación de empezar el día corriendo, con prisas y llegando tarde. Esto a la larga es muy beneficioso para nuestra ansiedad. O sea, para no sufrir esa ansiedad negativa, disfuncional diríamos.
Y claro, justo lo que decíamos del desayuno, si tenemos tiempo para prepararlo con calma, seguramente desayunaremos mejor, y nos sentará mejor ese desayuno. Seguro que os han dicho mil veces que el desayuno es la comida más importante del día. Pero recién despertados cuesta comer según qué cosas. En cambio cuando ya llevas un tiempo despierto, el cuerpo está más preparado para ingerir ciertos alimentos, que son los que nos van a dar más nutrientes y más energía para empezar el día.
Además, hay otros hábitos saludables como hacer un poco de ejercicio o preparar comida para el resto del día, para no acabar comiendo mal o poco sano.
Otra cosa que nos aporta indirectamente el madrugar es que nos acostaremos antes (todo esto si lo hacemos conscientes de lo imporatntes que es descansar).Evitamos trasnochar, que eso a la larga sí tiene efectos perjudiciales para la salud. Además, si nos hemos despertado pronto, seguro que estamos hechos polvo por la noche, así que incluso descansaremos mejor.
Y el sueño será más reparados (siempre que no lo estropemo trabajando hasta tarde, o mirando el móvil a última hora con la luz apagada y haciendo daño a nuestros ojos… en fin, ya sabéis de qué va esto)
En definitiva, ayudamos a tener menos estrés, alejarnos de depresiones y ansiedad, y descansamos mejor. Y nuestro cuerpo se activa para aprovechar la máximo las horas de luz.
Madrugar para la productividad Ahora bien. ¡Estamos aquí para hablar de productividad! Así que vamos a ver en qué sentido, madrugar nos puede hacer más productivos.
Lo primero es que a las 5 o las 6 de la mañana suele haber bastante silencio. A no ser que vivamos encima de una discoteca, como me pasó a mí en mis primeros años en Madrid.
Y si hay silencio, podremos centrar nuestra atención mejor en lo que estamos haciendo. O sea, mayor concentración. Tampoco hay llamadas a esas horas ni mensajes que nos distraigan, con lo que todo apunta a que nuestra concentración va a ser mayor.
Además, si hemos planificado y aprovechado bien ese tiempo, cuando empiece ya el ajetreo del día, habremos hecho ya alguna cosas de esas “importantes” que decimos siempre, las que nos acercan a nuestros objetivos. Y eso nos da la confianza de que estamos avanzando, y aunque el día luego se complique, podemos tener cierta tranquilidad de que estamos cumpliendo.
También, estaremos menos cansados (si hemos descansado bien por la noche, por eso lo de no trasnochar). Así que nuestra mente funcionará mejor y podremos tomar mejores decisiones. Un punto más en el apartado de acercarnos a nuestros objetivos, tomando las decisiones más acertadas o al menos pensadas en momentos de tranquilidad y agilidad mental.
Justo lo contrario de acostarse tarde, trabajar hasta tarde y acabar tomando decisiones (que van a ser trascendentales para nuestra carrera) a las tantas, cansados y deseando irnos a dormir.
Y no solo las decisiones, hemos hablado varias veces de los problemas que se enquistan solo por el cansancio, como esos pasajes que no salen y al día siguiente en un momento están solucionados.
Y en general podemos decir que vamos a estar más y mejor preparados para llevar a cabo esas tareas importantes
En nuestro caso, ¿qué ocurre?, en el caso de los músicos. Que evidentemente no vamos a madrugar para ponernos a estudiar con el instrumento. Así que en ese sentido no es algo que directamente nos ofrezca más tiempo de estudio… Bueno… pero indirectamente sí. Porque si solucionamos durante la mañana pronto algunas cosas que no tendremos que hacer después, eso sí nos da más tiempo para estudiar durante el día, y más calma también para estudiar bien.
Y sobre todo, lo que es muy recomendable es utilizar una parte de las mañanas para planificar, diseñar estrategias. Por ejemplo pensar en el repertorio que vamos a tocar, en el plan de estudio que vamos a seguir, en cómo organizar nuestra agenda, en revisar nuestro Gantt y tener presentes nuestros objetivos… Todo eso, que es ideal hacerlo con la cabeza fresca y descansada, sí podemos hacerlo si madrugamo. Y luego, durante el día, agotarnos menos con esas decisiones y ejecutar más y mejor todo lo que hayamos planeado.
Para qué NO madrugar Peeeero, ahora viene la otra parte, o al menos la que según mi experiencia no sirve de mucho si queremos madrugar por esto.
Yo NO madrugo para correr más, para ganar a nadie en ninguna carrera o ninguna competición por nada, ni para trabajar más horas que los demás ni nada por el estilo.
Es verdad que a mí me gusta madrugar… bueno, quizás “me gusta” no es la expresión correcta, pero encuentro muchas ventajas. Pero ya os he comentado muchas veces que en mi caso tiene sentido, primero porque tal como tengo diseñada mi vida familiar encaja con la idea de acostarme pronto y despertarme pronto. Después, porque tengo varios proyectos paralelos que requieren de distintas facetas o distintas competencias. Y muchas de las cosas, como escribir, leer, diseñar u organizar, que son cosas importantes y relevantes para esos proyectos, las puedo hacer por la mañana pronto.
Y además porque yo he notado que sí, que efectivamente mi cabeza funciona mejor por la mañana que por la noche.
Y lo que hago, para de verdad activar mi cuerpo y prepararme para aprovechar las mañanas, es tomarme media hora para meditar un poco y para activar mi cuerpo con un poco de ejercicio básico y después ponerme a trabajar.
Pero os aseguro que a las 22h estoy deseando dormir (que se duerma mi hijo y poder ir yo detrás).
¿Y vosotros qué? ¿A qué hora os despertáis? ¿A qué hora estáis escuchando este episodio? ¿Cómo lleváis esto de madrugar?
Contadme qué pensáis de todo esto, y de lo que que queráis, porque ya sabéis “todo esto solo tendrá sentido si es exactamente lo que vosotras y vosotros queréis”.
Así que espero vuestros comentarios, ya sea en Facebook, en las reseñas de iTunes, en los comentarios de iVoox o directamente en coachingdemusicos.com/contactar. Y si estáis en Spotify es que sois de los que estáis engordando la lista de descargas de este mes, que se ha notado un montón la llegada a Spotify.
¡Mañana es viernes! Y estaremos aquí a partir de las 7:11 de la mañana (mañana el podcast no madruga más de lo normal) con un nuevo episodio sobre técnicas de coaching.
Antes de eso, hoy como con algunos y algunas de los coachs que pudisteis escuchar hace unas semanas, así que estoy muy ilusionado por ello! Tengo ganas de verles. Y quién sabe lo que pueda salir de ahí…
Os lo cuento pronto. Mientras tanto, pasad un día estupendo y ¡NOS ESCUCHAMOS MAÑANA!
Comentarios