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Comentarios
Cuando vivia en NY conoci a un chico que trataba de salir de su adiccion a la cocaina y le costaba mucho, siempre entraba a programas de rehabilitacion, pues el le escribio a David, el llamado "el hijo de Sam" contandole su problema y este le respondio. Su carta parecia sincera, la de una persona que realmente se habia arrepentido. Decia que el versiculo de la Biblia que lo toco hasta hacerlo llorar fue el del Salmo 34:6 "Este pobre grito, y el Senor lo oyo y lo libro de todas sus angustias". Por lo que recuerdo, no me dio la impresion de una persona que trataba salir de la carcel, el sabia que tenia que pagar y queria hacer el bien a quien pudiera por el resto de su vida. Recuerdo que este chico estaba emocionado de haber recibido respuesta, el penso que no recibiria nada, en verdad en ese momento yo no sabia bien quien era David.