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Comentarios
Alberto Olmos y FDV no están de acuerdo en casi nada, y eso hace a está entrevista especialmente interesante.
Buena entrevista.
Que buena colaboración- entrevista.
gran programa...interesante y entretenido.
Comparto la idea de Alberto de que los novelistas viven algo atormentados. Si no no se entiende que sepan transmitir tan bien los sentimientos y miserias humanas en lo que escriben. Buena entrevista-conversación.
Una entrevista muy interesante. Solo dos breves apuntes. Primero, la realidad es que hoy en día la mayor parte de los escritores son currantes que tienen otro trabajo, escriben por las noches y los fines de semana, y a duras penas sobreviven gracias a bolos de conferencias, encuentros y actos, siempre con la maleta a cuestas. Esa imagen del escritor derrochador viviendo a todo tren pudo ser real hace quince o veinte años. Eso ya no existe, salvo casos muy excepcionales, que jamás deberían calificar una situación generalizada. Segundo: Por supuesto que Garcilaso y Lope de Vega necesitaban el apoyo público para sobrevivir. Cualquiera que los haya leído sabe que se pasaban el día adulando y suplicando a nobles para que les dieran soporte económico a cambio de sus elogios. Y los nobles no eran esforzados empresarios privados, sino representantes del estado que vivían de cobrar a los trbajadores el diezmo -los impuestos de la época-. Es una realidad histórica incuestionable: Miguel Ángel y Rafael estaban al servicio de los Estados Vaticanos, Velázquez y Goya suplicaban por ser pintores de corte, igual que Bernini, Händel o Purcell en sus disciplinas artísticas. Leonardo vivió primero protegido por Ludovico Sforza, Duque de Milán, y los últimos años al servicio de Luis XII, en París. Y lo mismo Botticelli, Vivaldi, Beethoven o Wagner, todos al servicio de reyes o nobles. Desde las pirámides de Egipto al Gernika de Picasso, buena parte de la historia de la cultura existe gracias al apoyo público. Evidentemente, no es -ni debe ser- la única fuente de apoyo -también han existido El Greco, Cervantes, Van Gogh o Cezanne, que sobrevivieron solo con mecenas privados-, pero esa imagen del artista del pasado como creador al margen de las subvenciones o el apoyo público, no se sostiene en absoluto con la realidad histórica. Al margen de lo dicho, siempre es un placer escuchar a Fernando y leer a Alberto Olmos. Abren miradas.
También hay Vips en México. Tienda y restaurante
me ha fallado Alberto Olmos. Elitista y llorica
Las notas de voz no las publicas todas.
Una semana de madrileños con raíces segovianas, enhorabuena Fernando por tu programa y las colaboraciones que eliges