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Comentarios
Gracias Pablo y Merom. A mí me pasa lo mismo, tengo deseos que sé que lo son, pero que están tan arraigados y me son tan familiares, que es difícil vivir sin ellos. Como decís, saber diferenciarlos y después darse cuenta cada vez que esos deseos aparecen en nuestra cabeza, es la clave. Muy enriquecedor vuestro diálogo. Abrazos para ambos.
los mismo digo merom gracias por contestar y por tu aporte que es muy claro, saludos a todos!!!
Muchas gracias por vuestras aportaciones, me ayudan y son constructivas. Un abrazo Pablo.
Por cierto, Pablo muchas gracias por compartir tus ideas. Me ayudan mucho. Cualquier cosas que compartamos todos y todas por aquí, es constructivo. Un abrazo.
PABLO, justamente después de unos días de la puesta en práctica e identificar deseos sin finalidad, he llegado a la misma conclusión que tú... Tenemos deseos enraizados y duele tener conciencia de que simplemente han sido y son deseos. Pero lo importante es que, ya le hemos puesto atención a ellos y esos deseos que debemos soltar y no perseguir más, ya están en alerta. Eso me alivia porque sé que antes o después, modelaré mis emociones hacia dichos deseos y poco a poco, serán menos importantes hasta tal punto, que desaparecerá la persecución de los mismos. Vamos a filtrar emociones, vamos a observarnos y a soltar lo que no necesitemos profundamente. El ejercicio no consiste, bajo mi punto de vista, en autoengañarnos diciéndole a nuestra mente que no necesitamos dichas cosas o dichas personas si no más bien, confrontación lo cual, hará sentirnos aliviados y aumentará la autoeficacia. Suerte!!!!!
meron muy bueno lo que dices y buena estrategia para diferenciar, ayer me puse a hacer una lista de cosas para hacer y las separe entre deseos y necesidades, lo que me pasó es que me costó aceptar que algunas cosas sean deseos vacíos digamos porq hace mucho tiempo las hago, es como que no es tan fácil dejar los deseos, creo q en primera instancia detectarlos es muy bueno, luego ir dejando unos pocos. saludos
Centrarnos en nuestras necesidades internas, nos evita obsesionarnos en otros deseos que no sentimos tan profundamente. En nuestro día a día nos vamos cargando de deseos que no tienen finalidad... he descubierto que la mejor forma de diferenciar un deseo de una necesidad (deseo profundo, como aquí lo habéis llamado también), es preguntándome « para qué »... si tengo una respuesta que me llene y de sentido, entonces si estoy frente a una necesidad... me gustaría que ustedes también compartieran sus estrategias personales para diferenciarlos. Un enorme abrazo. Gracias
Querido Pablo te he entendido y me parece muy claro lo que dices, a mí me pasa exactamente lo mismo. La diferencia entre seguir la necesidad o el deseo es la atención que se pone en lo que se hace (en este caso en comer). Gracias y abrazos.
Alvaro cómo va? muy buena la aclaración es una gran manera de ver y separar ambas cosas, como bien dicen abajo no debe ser fácil detectar todas las necesidades y deseos pero si arrancamos con los más básicos vamos a adquirir la claridad para ir viendo más profundamente, pongo un ejemplo, mi necesidad interna y eso lo tengo claro es comer lento y no en exceso para mantenerme saludable digamos, y un deseo es cuando hay comida en exceso en alguna reunión es comer rápido y mucho, luego de hacer esto último me siento mal y con culpa por haberlo hecho. si sigo a mi necesidad de comer bien siempre me siento en paz aunque al principio hacer el hábito no sea fácil. saludos y espero se haya entendido
Hola Anónimo, lo que llamas deseo profundo es lo que yo he llamado en este audio una necesidad. Todo depende un poco de cómo se utilicen las palabras. La cuestión es diferenciar entre lo que, como tú dices, es profundo, intenso y repetitivo, y lo que es superficial y basado en cuestiones más sociales que profundamente personales. Gracias por tu interesante mensaje. Abrazos.